Nicki etiquetó incluso a Tunechi y Drake, dos de los asistentes, y a Mack Maine, el presidente de la compañía, para asegurarse de que leyeran su mensaje
La semana pasada Nicki Minaj se encontraba tan tranquila en casa, cuidando muy probablemente de su hijo pequeño, cuando abrió sus redes sociales y comenzó a ver fotografías de muchos de sus compañeros de profesión y amigos juntos.
Resulta sencillo imaginar cuál sería su sorpresa al descubrir que estaba teniendo lugar una fiesta del sello discográfico Young Money, fundado por Lil Wayne y al que ella misma pertenece, con motivo del cumpleaños del rapero y que esa era la primera noticia que tenía al respecto.
Cualquier otra persona habría optado por no hacer nada y quedarse con la duda de por qué no había sido invitada, pero Nicki nunca ha sido partidaria de morderse la lengua y quiso dejarle claro a los organizadores del evento que sabía que la habían excluido.
“Yo también la pasé muy bien“, aseguró con ironía en la sección de comentarios de una de las fotos que trascendió de la velada, junto a un emoticono de una carita que daba a entender todo lo contrario.
Nicki etiquetó incluso a Tunechi y Drake, dos de los asistentes, y a Mack Maine, el presidente de la compañía, para asegurarse de que leyeran su mensaje, y al menos uno de ellos lo hizo. Maine se percató rápidamente de que una de sus mayores estrellas se había sentido claramente ofendida y no tardado en darle una explicación.
“No te pongas así, Nicketo. Fue una cosa de último momento. Podemos volver a repetirlo. No fue lo mismo sin ti“, le ha prometido para tratar de calmarla.